Con la llegada de las fiestas, muchas personas buscan algo más que regalos y recetas: quieren atraer buena fortuna para el año que comienza.
Entre las prácticas más populares aparece el ritual del laurel en el agua, una tradición vinculada al Feng Shui que promete armonía, prosperidad y energía positiva en el hogar.
Desde la antigüedad, el laurel representó victoria y honor. En la filosofía del Feng Shui, sus hojas son consideradas protectoras y se usan para atraer dinero y bienestar. La idea es que este elemento natural canalice el chi, la energía vital, y ayude a equilibrar el entorno.
La práctica tiene raíces taoístas y se realiza el 24 de diciembre, antes de la noche, aprovechando la carga positiva de la Navidad. Según quienes siguen el Feng Shui, este momento es ideal para renovar energías y preparar el camino hacia un año nuevo lleno de salud, amor y prosperidad.
Para ponerlo en práctica, necesitás:
El paso a paso de este poderoso ritual:
Este sencillo ritual busca limpiar la energía del hogar y atraer abundancia económica y armonía familiar.
Cuando llega diciembre, el árbol de Navidad se convierte en el centro de la decoración del hogar. Luces, guirnaldas y adornos son los protagonistas, pero en los últimos años se popularizó una práctica que muchos consideran clave para atraer energía positiva: colocar monedas entre las ramas del árbol.
Según la tradición, las monedas representan prosperidad, estabilidad económica y oportunidades para el nuevo año. Funcionan como un amuleto que busca abrir caminos hacia el crecimiento y la seguridad material. La idea es que, al estar presentes en el árbol, activen la intención de abundancia en el hogar.
Algunas personas recomiendan dejar las monedas todo el mes y retirarlas el 6 de enero, guardándolas en la billetera para mantener la energía de prosperidad durante el año.
Este ritual tiene raíces en creencias populares que vinculan los objetos metálicos con la atracción de riqueza. En la práctica, más allá de lo simbólico, se convierte en una forma de reforzar la intención de comenzar el año con estabilidad y bienestar.

